Yo soy…
Seguimos con los videos sorpresa, los regalos indescriptibles e inesperados, los destellos de vida y de lo que la llena de sentido. Seguimos…
Éste es el video premiado en el concurso «Dame un minuto de paz» al que he llegado gracias a Olalla García, que lo escogió para responder a la propuesta que Alberto nos hizo desde su blog de Principia Marsupia, del que ya os hablé. Gracias, Olalla. Gracias, Iban.
No sé si sabría decir quién soy. Y menos hacerlo en un minuto. Probablemente sería una sucesión de palabras, pero ¿cuántas palabras caben en un minuto?
Quizá fuera algo así como:
Mujer, madre, hija, hermana, tía, amiga…
una niña de corazón alado..
viajera, comunicadora, narradora y escritora…
conversadora sin límite…
alegre, valiente, tierna, brusca, consciente, vulnerable..
bendecida y superviviente..
adicta a la risa de mi hijo, a aprender constantemente, a los abrazos (darlos y recibirlos), a una mirada limpia, a un silencio arrobado y compartido, al mar y al bosque, a una chimenea y a los atardeceres, (sobre todo en el mar), a cantar mal y a bailar mejor (pero a hacer ambas cosas cada día), a despertar con los pies entrelazados, a los desayunos en general y sobre todo a los del domingo con zumo y periódico, y a las palabras conmovidas…
río y lloro, grito y callo, tiemblo y me fío, camino y espero…
y ante todo, me siento amada, privilegiada y agradecida…
porque es cierto: no soy, somos.
Sería eso y mucho más. Además, Iban lo hace mucho mejor que yo ;-). Pero quería al menos intentarlo :-).
Pepa
Qué bonito tu «yo soy/somos». Me ha encantado, Pepa. Gracias!!
Gracias! Es que me ha conmovido, y eso y una noche de vacaciones conjuntado…peligro! 😉
Un abrazo para los dos y el mar,
Pepa
Que video más bonito. Me ha impactado, lo he visto varias veces. Muchas gracias por todas las historias que nos haces llegar y que nos ayudan a crecer. Un saludo.
Hola Pepa!
Mi comentario va sobre tu libro SER MADRE, SABERSE MADRE, SENTIRSE MADRE.
Acabo de leer la última página de tu libro hace unos minutos, es uno de esos libros de los que te da pena acabarlos, puesto que me he sentido acompañada leyéndolo y ahora esta compañía se ha evadido, aunque queda su esencia.
Cuando adquirí tu libro, compre otro porque sabía que habría otra madre a la que me gustaría regalárselo. Con la lectura de las primeras páginas, decidí la persona, una amiga que está en el proceso de un acogimiento permanente. Entonces comprendí cómo podía ser su sentir, tal vez la soledad o incomprensión, del entorno que no entiende un embarazo no biológico. Creo que le será útil tu vivencia, la expresión de tus sentimientos y la explicación de todo el tejido vincular que tejes alrededor de tu más íntima y profunda vivencia hacia el sentirte madre.
Soy madre de dos niñas, y tu vivencia no es distinta a la de una madre biológica, ser madre te hace consciente de tí misma, de tus defectos y tus debilidades y sobre todo esa conciencia te hace aceptarte tal como eres e intentar ser mejor persona, que no perfecta.
Ser madre te cambia las prioridades, y para mí como a tí mis hijas son lo mejor que me ha pasado en la vida.
Te felicito por ser capaz de expresar tus sentimientos de esta forma, no dudes que para tu hijo José tus escritos serán un tesoro, que darán sentido a su ser.
Por último decirte que, tuve la suerte de escuchar tu ponencia en Alcoi a principios de julio, y que decirte… me encantó la simplicidad y la complejidad al mismo tiempo que tenías de explicar las emociones, el sentir primero desde la tripa,después desde el corazón y por último desde la cabeza, se me ha quedado grabado.
A medida que avanzas en tu libro te das cuenta que cada vez lo estás sintiendo más desde la tripa.
Me encantó también y creo que a todo el auditorio, el grito de alegría y el abrazo que con que te recibió tu hijo José, dejaste de representar a Pepa profesional, para ser Pepa madre, y supiste diferenciar muy bien los dos tiempos. Aunque interiormente creo que la Pepa madre, te hace mejor profesional, y cómo tu dices no está separado.
Un abrazo y felicidades por tu buen hacer.
Aitana
ufff, Aitana, qué emoción al leer tu mail! Ese libro fue algo importante para mí. Todos lo han sido, pero ése…ése es parte de mi alma, y cada vez que alguien me dice que coincide con su vivencia, o que le ayuda en lo que vive, me emociono…Respecto al final de la conferencia de Alcoy…qué te voy a decir! cuando veo a José correr con los brazos abiertos a abrazarme…me siento bendecida.
Gracias de corazón,
Pepa