Sólo un minuto para mojarse en un charco
4 febrero 2013
Es algo más de un minuto…
..es el reflejo de lo más precioso de la vida…
..es toda una filosofia..
..es imposible no sonreír.
Lo difundo porque nos hace falta sonreír. Y recordar. Y mojarnos en charcos.
Ah! y alguien que nos espere y nos celebre el charco! sea perro o persona.
¡No dejéis de verlo! ¡Ni de sonreír!
Pepa
¡Genial! El placer de descubir la vida, el placer de lo cotidiano. A mis padres de la Escuela les digo: ¡fijaos en las pequeñas cosas, disfrutad de ellas con vuestros hijos!:
Las pequeñas cosas del día como el despertar, las voces consoladoras, las miradas, las caricias de los padres, la hora del baño, la llegada a la escuela, una caída con el consuelo del adulto, el viaje a ver a los abuelos, descubir el rojo, los pies en los charcos, «Los tres cerditos», el cubo y la pala, el empujón al amigo….es aprender, es vivir. Como dice Carmen Diaz Navarro «saber que el oficio del niño es descubrir, curiosear la vida, jugarla y vestirla de blanco».
Gracias, Pepa por los regalos que nos haces.
Es genial, sí! 🙂 me imaginaba todo el rato a José… que hubiera salpicado muuuuuuucho más… una gozosa manera de empezar el martes. Besossss
Pepa, no hace mucho que sigo tu blog pero no deja de emocionarme, sobre todo en esas pequeñas cosas,Maravilloso el video gracias por compartirlo.
Me encanta. El niño es prudente. Disfruta el charco sin saltar sobre él para no mancharse mucho pero lo que más me llamó la atención es que no pierde de vista a su perro y la cara del perro esperando. Gracias por compartir. Siempre me emociono con tus cosas. Saludos.
Gracias Make, gracias Ana! A mí me emociona que me leáis 😉
Un abrazo,
Pepa
Encantado de reencontrarte… En un charco
ey, Diego, te tenía perdido! me llamas y desayunamos un día? (perdí tu numero con otros cuantos cuando murió mi movil anterior, las tecnologías)
Un abrazo y gracias por volver «mojado en un charco»,
Pepa